Jornada perfecta para nuestros Juveniles que vencieron ambos fuera de Mallona. El Juvenil Liga Nacional lo hizo por 0-2 en Olaranbe contra el Aurrera de Vitoria, con dos tantos de Iban Ribeiro, uno en cada periodo. La próxima cita es en Mallona contra en Antiguoko B. Por otro lado, el Juvenil Liga Vasca también ganó por 1-2 en su salida a Ordizia. Aitor y Markel marcaron en la primera parte de Altamira y los de casa acortaron en el marcador en la segunda mitad. El próxima partido es en casa contra el Ariznabarra.
DANOK BAT JUVENIL LIGA NACIONAL: Ekaitz, Gaizka, Markel, Ander, Lopi, Calero, David, Jonan (Cortazar), Jon (Bittor), Jacob (Robles) y Ribeiro (Buján).
El Danok Juvenil B se alzó con el triunfo en Gasteiz gracias a los dos goles de Iban Ribeiro, uno en cada parte. La primera mitad resultó muy disputada en el centro campo, con un par de ocasiones claras para marcar del Danok y ninguna acción de peligro real del Aurrera de Vitoria. Justo antes del descanso llegó el 0-1. Un saque de banda en largo cerca del córner que no acertó a despejar ni a rematar nadie y el balón quedó muerto dentro del área pequeña para que Ribeiro empujara a la red.
Tras el descanso, el Danok decidió el partido en el minuto 10 con el segundo tanto. Una buena jugada en ataque con varias combinaciones y un último centro de Jon desde la banda que Ribeiro de nuevo controla dentro del área y a la media vuelta de tiro raso marca. Este segundo acto fue más disputado todavía que el primero. Con más ocasiones por ambos bandos y más claras para los de Fika. Por parte local, Ekaitz tuvo que empelarse a fondo para evitar que el Aurrera recortara en el marcador.
DANOK BAT JUVENIL LIGA VASCA: Aitor Maza, Eder Martínez, Adrián ‘Bolo’, Unai López, Markel Arana, Adrián Beloki (Edwin Baun), Danel Agudo, Beñat Maiztegi (Unai Zalbide), Ioritz Tamayo (Alberto Loidi), Aitor Añibarro (Unai Arévalo), Dani Jiménez (Jon Suárez).
Victoria en el aguacero de Ordizia. Ordizia 1 Danok Bat 2
El Juvenil C logró el sábado en Ordizia superar a su rival, al intenso aguacero y al impracticable terreno de juego, logrando una victoria que fue cómoda, al menos en los primeros 85 minutos. Los guipuzcoanos, últimos en la clasificación, apenas inquietaron a los de Asier Ormaza, y tuvo que ser el árbitro quien pusiera emoción a un encuentro, por lo demás, más que decantado del lado del conjunto visitante. La expulsión de Aitor Maza a falta de cinco minutos del final, tras encajar el 1-2, hizo que los nervios dominaran los últimos compases del choque. No obstante, al final la lógica de lo visto en el césped se impuso en el marcador.
El encuentro no fue brillante y nunca no pudo serlo en un campo, el de Altamira, cubierto de balsas de agua. No obstante, el Danok se mostró superior, muy sólido en defensa y con más sensación de peligro en ataque, especialmente de la mano de Dani. El primer gol vendría de un certero disparo de Añibarro con la zurda, y el segundo, siete minutos después, en una falta que puso Danel para que Markel rematara de cabeza a la red. Con el 0-2 se llegaba al descanso. Tras la reanudación, el panorama no cambió. Seguía lloviendo con intensidad, el Danok controlaba el partido y Maza no tenía ningún trabajo. En el minuto 24 Aitor Añibarro dispondría de una buena oportunidad en el lanzamiento de una falta que detuvo con acierto el portero local. Los minutos transcurrían y todo parecía indicar un final tranquilo.
Sin embargo, el árbitro se encargó de complicarlo. A falta de cinco minutos para el final, en el saque de una falta lateral, el Danok encajaba el 1-2. Aitor Maza se dirigió al colegiado para protestar, puesto que el lanzamiento se había producido cuando todavía no había terminado de colocar la barrera. Esto le costó al portero del Danok primero una tarjeta amarilla y, seguidamente, una segunda, por insistir, lo que dejaba a los de Fika sin guardameta y sin la posibilidad de que Ander saltara al terreno de juego porque ya se habían agotado los cambios. Alberto Loidi se puso los guantes y aguantó con valentía el resto del partido, con el árbitro empeñado en señalar faltas inexistentes cerca del área visitante.
Aunque no es habitual en este espacio hablar de los árbitros, en esta ocasión merece la pena señalar que el colegiado enseñó siete tarjetas amarillas a jugadores de ambos equipos, en un encuentro en el que no se contabilizó ninguna entrada o jugada digna de sanción. Tras esta victoria, el Danok se consolida en la mitad de la tabla. Es octavo con 31 puntos, a seis del cuarto clasificado y ocho por encima del Real Unión, equipo que marca las posiciones de descenso. El domingo recibe en Mallona al Ariznabarra (18.00 horas).